Ingredientes:
- marisco al gusto, limpio y listo para usar, gambas, mejillones, almejas, cigalas,…
- 1 cebolla pequeña
- 200g arroz
- espárragos y guisantes, al gusto
- 900 cc caldo de pescado
- 50g queso parmesano rallado
- 25g mantequilla
- 1/2 vasito de vino blanco seco
- aceite de oliva
Preparación:
- Calentamos el caldo y cuando rompa a hervir, apagamos el fuego
- Mientras…. calentamos el aceite en una cazuela de fondo espeso y cuando tome temperatura rehogamos los espárragos troceados, ligeramente salados. Reservamos
- En el mismo aceite salteamos las gambas, ligeramente saladas. Reservamos
- Una vez picada la cebolla, menuda, la rehogamos hasta que tome color, sin requemarse
- Añadimos el vino y los moluscos para que se abran.
- Una vez abiertos los reservamos y dejamos reducir el fondo de la cazuela hasta que el líquido se haya evaporado casi por completo
- Es el momento de añadir el arroz. Removemos bien para homogeneizar
- Regamos con unos cucharones de caldo bien caliente, los espárragos reservados y unos pocos guisantes; mezclamos y proseguimos la cocción a fuego suave.
- Cuando veamos que el caldo está casi absorbido, añadimos más caldo, seguimos removiendo, y así sucesivamente hasta que el arroz esté meloso y en su punto.
- Incorporamos la mantequilla junto con el chorretón de nata y lo trabajamos, hasta que se haya incorporado todo completamente al arroz…
- Una vez el arroz esté en su punto de dureza y cremosidad ( unos 17′) incorporamos el queso rallado. Rectificamos de sal y apagamos el fuego. Lo trabajamos todo para que se ligue
- Servimos, sin dejar reposar, decorado con el marisco y los trocitos de espárragos reservados en caliente
NOTAS:
- Sobrará un poco de caldo, pero más vale que sobre que quedarnos cortos. Generalmente el volumen empleado es de 4 de caldo por 1 de arroz
- El caldo hay que añadirlo poco a poco y remover regularmente el arroz, para que no se pegue y se haga uniformemente
- Hacia el final hay que ir añadiendo menos caldo, es por eso importante controlar el tiempo de cocción. El arroz generalmente a los 17′ está en su punto
- Se puede disminuir o aumentar la cantidad de mantequilla y parmesano, a gusto del consumidor
- Si el sabor del risotto resulta demasiado intenso lo podemos modular añadiendo, justo antes de servir, un chorrito adicional de nata líquida
- por el mismo motivo, conviene ir añadiendo poco a poco el parmesano e ir probando el punto de sabor
- Es importante que el vino se haya evaporado casi por completo para que su sabor no aparezca, en el risotto, en primer plano gustativo