
Ingredientes:
- berenjenas
- leña para hacer fuego
Preparación:
- Hacemos la instalación necesaria para encender el fuego y esperamos a que se avive

- Colocamos una parrilla encima de las llamas, procurando que quede estable, y colocamos encima las berenjenas, en contacto con la llama viva. Las dejamos unos 5 min.

- Les damos un cuarto de vuelta y las dejamos 5min. adicionales. Dos nuevos cuartos de vuelta de unos 5min. cada uno. Con unas tenazas, procurando no quemarse, las tocamos y si notamos que están tiernas y no ofrecen resistencia, ya están listas. En caso contrario las dejaríamos unos minutos adicionales por la zona que ha quedado un poco firme

- Las cogemos por el rabo con unas tenazas, procurando no romper la piel y las pasamos a una fuente para que se entibien


- Una vez las podamos manipular; con un cuchillo les cortamos el rabo y las pelamos, procurando retirar completamente la piel. Reservamos y ya están listas para usar según la receta escogida.


NOTAS:
- Es conveniente asarlas a la llama, enteras, sin pinchar la piel y con su rabo, es por ahí por donde las podremos coger y manipular fácilmente sin desgarrar la piel
- A pesar de lo que pueda parecer sólo se achicharra la piel de las berenjenas, la carne queda tierna, blanca, con un ligero toque dorado en la zona de contacto
- Es conveniente pelarlas nada más podamos hacerlo para que la carne de berenjena no tome un sabor excesivo a humo
- El tiempo de asado es indicativo, depende de lo vivo que sea el fuego, del tamaño de las berenjenas y de lo tiernas que estén
- El mismo proceso puede utilizarse para asar pimientos carnosos
- Las berenjenas ahumadas son una verdadera exquisitez, una vez que se han probado, su sabor es difícil de olvidar
- Las podemos hacer a la plancha, obviamente estarán exquisitas pero no tendrán el toque ahumado que las caracteriza
- Un sucedáneo consiste en asarlas al horno, o a la plancha, y sazonarlas con sal ahumada
- Es una vieja receta típica de las marjales de Valencia que se ha ido transmitiendo de madres a hij@s de generación en generación
- La forma de apreciar todo su sabor es tomarlas, tibias, espolvoreadas con ajo y perejil picado, bien regadas de aove y un toque de escamas de sal