Ingredientes:

• 250g cacahuetes crudos, o tostados al natural, sin sal
• 150g chocolate blanco
• 1 cucharada sopera de mantequilla de cacahuete, tahina o almendrina
• 1 cucharada sopera de azúcar

Preparación:

• Tostamos los cacahuetes, a seco en una sartén, o en el horno, en el caso de que estuvieran crudos. Reservamos

• En un cazo de fondo espeso, introducimos el chocolate troceado, la tahina y el azúcar. Lo introducimos en otro cazo más grande, con agua, lo ponemos a calentar a fuego suave y hacemos que el chocolate se vaya fundiendo, al baño María.

• Cuando vemos que el chocolate está ya casi fundido, apagamos el fuego y seguimos trabajando la mezcla hasta obtener una textura brillante, perfectamente lisa y homogénea

• Añadimos los cacahuetes, mezclamos bien para uniformizar y sacamos el cazo del baño María. Esperamos un momento hasta que se entibie la preparación y…

• … con una cuchara sopera, y otra auxiliar, vamos colocando porciones de cacahuetes, con su crema, sobre una hoja antiadherente de silicona o papel, dispuesta sobre una bandeja rígida. Acabado el proceso, introducimos la bandeja en la nevera durante varias horas para que los bombones se endurezcan. Una vez duros, los despegamos con cuidado, los…

• … pasamos a un tarro de cristal, los conservamos en la nevera y los vamos consumiéndo a discreción

NOTAS:

• El chocolate blanco una vez fundido ya no vuelve a endurecerse a temperatura ambiente. Así pues, para que los bombones se mantengan duros y compactos es necesario conservarlos en frío, en la nevera.
• El toque frío de los bombones les da un toque muy especial en boca
• Por otra parte, aunque el chocolate blanco es muy dulce, los cacahuetes y la tahina no lo son, el azúcar es necesario para equilibrar el sabor
• El azúcar añadido no se disuelve en el chocolate fundido, con lo cual conseguimos aportar al conjunto un toque crujiente de lo más interesante
• Procurad no hacer demasiado gordos los bombones
• Aunque se puede hacer la receta con chocolate con leche o negro, para mí el chocolate perfecto, es el blanco
• Cuidado, porque son muy adictivos y enganchan
• Está receta está inspirada en un paquete de tejas de chocolate blanco y cacahuetes que nos regaló Flavie, una amiga de la familia. Fueron comprados en Francia, en el transcurso de un viaje de Suiza a Bélgica. La receta ha salido calcada a la original, salvo que la conservación es en frío.