Ingredientes:

• quinoa
• aceite para freír

Preparación:

• Preparamos la quinoa según las instrucciones del paquete. Una vez cocida, la escurrimos con un colador y la dejamos un momento sobre papel absorbente para que pierda casi toda su humedad

• En una satén, ponemos a calentar abundante aceite y cuando tome temperatura añadimos la quinoa, procurando que nos quede de capa fina. Removemos de tanto en tanto para que todos los granos de quinoa se tuesten uniformemente

• Esperamos a que los granos de quinoa presenten un color dorado intenso.

• Los sacamos con una espumadera, los dejamos sobre papel de cocina para que pierdan el exceso de aceite que pudieran tener, y ya están listos para aportar su toque crujiente y almendrado a todos los platos, dulces o salados, a los que se lo añadamos

• En este emplatado, la quinoa es el toque crujiente de un salmón a la plancha, con arroz blanco y salsa Mamichette

NOTAS:

• La quinoa crujiente se puede añadir a cualquier plato salado. Está especialmente indicada con las ensaladas
• Es importante que la quinoa adquiera un color dorado intenso, de lo contrario no nos quedará crujiente sino ligeramente dura y gomosa
• Si la quinoa crujiente, va a acompañar un plato salado, le podemos dar un toque de sal. Si va a acompañar un plato dulce, entonces le podemos dar un toque de azúcar
• No conviene preparar mucha quinoa a la vez, ni llenar demasiado la sartén en la que la vamos a freír