Ingredientes:
- 100g mantequilla
- 25g trufa fresca
Preparación:
- Rallamos la trufa
- Troceamos la mantequilla en dados y esperamos a que se ablande a temperatura ambiente
- Juntamos la trufa rallada con la mantequilla
- Y lo trabajamos con un tenedor,hasta obtener una pomada uniforme y bien trabada
- Compactamos la pomada obtenida en forma de lingote irregular
- Colocamos la mantequilla trufada sobre una lámina de plástico y, con la plama de la mano, haciendo que ruede sobre el mármol como si fuese un rodillo, le vamos dando la forma tubular
- Apretamos el tubo de mantequilla trufada y enrollamos los extremos de plástico que sobresalgan. Ya está lista para congelar. Cada vez que necesitemos usarla en alguna preparación, sacamos el tubo del congelador y, con muchísima precaución, iremos cortando discos, al gusto.
NOTAS:
- Los discos cortados del tubo de mantequilla trufada, se suelen añadir, en el emplatado, sobre la carne o pescado. También se suelen añadir en los guisos y salsa en el último momento
- Puede utilizarse mantequilla salada, o añadirle una pizca de sal a la mantequilla
- No es conveniene hacer mucha mantequilla a la vez, por el precio de la trufa fresca y sobre todo para que la trufa conserve todo su aroma hasta acabar el tubo.
- Hay que tener mucha precaución al cortar los discos de manequilla del tubo congelado. Al principio ofrece una gran resistencia, pero una vez que la hoja ha hecho mella en la superficie, el corte va muy rápido