Ingredientes:

• patatas medianas, con su piel, limpias, listas para usar
• 1 ajo mediano
• 3c.s.( cucharadas soperas) de aove
• 1c.c. (cucharadita de café) de pimentón dulce, comino molido, orégano…, al gusto

Preparación:

• Ponemos a hervir las patatas, limpias y con su piel, a fuego lento y la olla tapada; hasta que estén tiernas

• Las sacamos de la cazuela, las aplastamos y laminamos con una espumadera y un mazo de mortero

• Preparamos el aliño: rallamos el ajo, añadimos el resto de los ingredientes y lo mezclamos todo hasta obtener un adobo uniforme; pintamos la superficie de las patatas chafadas y las espolvoreamos con sal

• Calentamos la plancha, ligeramente untada de aceite y cuando tome temperatura, con una espátula metálica, vamos colocando encima las gachas de patata por el lado que hemos adobado. Una vez las gachas en la plancha, untamos la otra cara y espolvoreamos de sal, al gusto

• Cuando ya están tostadas y crujientes por una cara, les damos la vuelta y esperamos a que se hagan completamente por la otra. Las sacamos en su punto y las servimos directamente, de la plancha al plato, acompañadas de una ensalada de lechuga o como guarnición de un plato de carne o pescado

NOTAS:

• Si las patatas son de buen tamaño, una vez cocidas, las podemos partir por la mitad, antes de aplanarlas
• El aliño tiene un sabor suave, si queremos potenciarlo basta con añadir un poco más de algún ingrediente, al gusto
• En lugar de la plancha, podemos colocar las patatas gachas, ya aliñadas por ambas caras, sobre una hoja de papel sulfurizado, en una bandeja, y hornearlas unos 20′ a 180º, o hasta que presenten un bonito color dorado
• Esta receta sirve para preparar también, calabaza o boniato
• He denominado este plato -patatas gachas- por el aspecto que tienen y también porque al aplanarlas, una vez cocidas, se quedan agachadas…